Elegimos una ruta que mezcla puentes, aves, cañones, río....y un entorno espectacular.
La Garganta de las Buitreras esta considerada como "La Catedral de los Barrancos deportivos de Andalucía".
Nos dirimos hacia la estación de Gaucin-El Colmenar en Málaga. Y ya dentro de Él Colmenar buscamos la central hidroeléctrica, justo en la cancela hay sitio para un par de coches, y si no, dejamos el coche en el pueblo.
Justo en la central hidroeléctrica arranca nuestra ruta.
Atravesamos la puerta metálica y unos metros llegamos a una gran tubería, aquí vemos un cartel que nos indica que giremos a nuestra izquierda.
Un poco más arriba, unos 60 metros, el sendero gira a la derecha bajo la tubería.
Seguimos caminando y nos vamos acercando al río Guadiaro. Nos encontramos un puente colgante, con un arroyo con una bonita poza de agua cristalina.
Vamos viendo el río Guadiaro a nuestra derecha y el charco del moro, que bajaremos después.
A partir de aquí empieza una ligera subida y poco a poco nos vamos acercando al inicio de la Garganta o Cañón de las buitreras.
Ahora comienza la primera parte de la subida, unos escalones altos de madera nos dan idea del desnivel, en 300 metros de recorrido superamos 80 metros de desnivel.
Llegamos así a una explanada, dónde tenemos una vista espectacular del inicio del cañón. Paramos para coger aire y observar los numerosos buitres que nos sobrevuelan.
Comenzamos el segundo tramo de subida, más dura que la anterior y con un calor ya considerable. Ahora los escalones son de piedra y el desnivel es importante pero sabemos que el final de ruta lo compensará.
Después viene un tramo de bajada quel bajamos con cuidado. Llegamos por fin al túnel que nos dará paso al Puente de los alemanes con unas vistas preciosas dela zona.
Tras una pequeña parada, retrocedemos nuestros pasos con el objetivo de llegar al charco del moro.
El Charco del Moro, es una larga poza, rodeada de altas paredes calizas y con una playita de arena. Allí paramos para tomar nuestro almuerzo, con los pies en el agua y disfrutando de una vistas increíbles.
Algunos aprovechan para la siesta, otros para tirar piedras al río( hacer la rana con la piedras) y ver quién da más saltos y llega mas lejos.
Después del descanso, seguimos camino de vuelta y en nada estamos en el coche.
Acabamos ruta con la esperada cerveza final ruta y con un regalo casero de nuestro compañero Juanma, graciasssss.
Ya esperando fecha para la siguiente...aunque el jefe se tendrá que poner las pilas...que estamos en un plan....
¡¡¡¡¡Vamosssssssss!!!!!!!